Muchas veces las pequeñas partes no son solo bonitas, sino que además nos pueden contar las historias de vida de los animales que recolectamos. Para los gasterópodos (caracoles) la forma del ápice del caparazón nos puede decir si estas especies se dispersan a través de larvas que se alimentan en el plancton o las que se alimentan de sus reservas de vitelo. Cuando encontramos nueva fauna, podemos aprender más de lo evidente. Foto cortesía de INSPIRE: El Margen Chileno 2010.
INSPIRE: El Margen Chileno 2010